COLUMNISTAS

El renacido Movimiento Ciudadano

 

Por José Páramo Castro

El artífice de que Movimiento Ciudadano haya recuperado su registro como partido político fue Edmundo Jacobo. Ese partido ya había cerrado oficinas, regresado algunos vehículos, despedido personal, cuando, de la noche a la mañana: que dice el INE que siempre no. Y todo volvió a ser como antes.

Todo sucedió el 1 de julio de 2018, cuando no alcanzó el 3 por ciento y se le retiró el registro en todo el país. Si a alguien va a extrañar Movimiento Ciudadano será al aviador Edmundo Jacobo, por eso colocó en primer plano a una plañidera que recordara que para la derecha la política es como una telenovela.

Ahora a Movimiento Ciudadano lo mantienen vivo sus relaciones con gente de otros partidos más que por sus líderes de poca monta intelectual y menos agraciados en su trato. Está el líder vitalicio y propietario del partido y la franquicia, Dante Delgado, también el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro; el gobernador de Nuevo León, Samuel García; el presidente municipal de Monterrey, Colosio Riojas, y un gris diputado de apellido Maynez. Ah, y la merecedora del Ariel a la mejor actriz dramática, Patricia Marquet (Mercado).

 

 

La fragilidad del partido es reflejo de la debilidad de sus líderes. Un partido que surge de las ideas ociosas de un reo como Dante Delgado, y que tiene como apoyo político a un gobernador bajo sospecha de tener nexos con grupos del crimen organizado; y un gobernador silvestre que a duras penas está domesticado, como Samuel García, o el heredero del apellido Colosio, cuyo pedigrí de que de poco le servirá a la hora de mostrar vocación política o un discurso congruente de más de tres minutos.

Probablemente por su origen delictivo Movimiento Ciudadano tiene como consigna defender a delincuentes, acusados de corrupción, incluso a sospechosos de asesinato como sucede con el secretario técnico del Senado, José Manuel Virgen del Río.

Para nadie es un secreto que el Poder Judicial es el epicentro de la corrupción en México, y quieren alejar, lo más posible su vulnerabilidad, por ser el único poder que no es electo por la población con la nostálgica legitimidad del dedazo, de la designación. Cuando en realidad la fragilidad del Poder Judicial es precisamente su falta de apoyo popular desde el momento mismo de su nombramiento.

Dentro del Poder Judicial pueden crear conflictos de segunda categoría, plagios, arreglos en lo oscurito, subasta de fallos, etc. Lo cierto es que, desde la perspectiva de Dante Delgado, esas prácticas representan la independencia de la Suprema Corte de Justicia. En una percepción propia de otro delincuente. Porque lo suyo, lo que le es propio a la Corte, según la visión retrógrada de Dante, es la corrupción y el simple hecho de denunciar las anomalías que ocurren en sus procesos, implica violar la independencia de los ministros, quienes se le debería aplicar una auditoría para conocer si sus bienes corresponden a sus salarios, que por altos que sean no justifican las propiedades, bienes y cuentas que poseen.

Movimiento Ciudadano defiende a quienes no están dentro de la ley, más de uno de sus militantes anda huyendo.

En mayo de 2020, Movimiento Ciudadano inició el proceso de destitución del exdiputado local Horacio Jiménez López como representante suplente de ese partido ante el Instituto Electoral del Estado de México, luego de su remisión a las autoridades por la supuesta agresión contra su pareja. Tampoco podemos olvidar al imberbe Jorge Álvarez Maynez, quien apoyó un fideicomiso que estuvo en manos de los panistas más radicales, los fascistas Yunes, y cobijados por los hermanos Pazos, Luis y Baltazar Pazos de la Torre, quienes desde sus estaciones de radio manipulan información y tergiversan la realidad del estado y del país, son como una especie de tentáculos de Vox en México, pero nacidos en Veracruz. También defendió a ultranza la dignidad de Margarita Zavala.

Hace uno meses, en conferencia de prensa en Tampico, Tamaulipas, Dante declaraba enfático que quien se metiera con las mujeres se metía con Movimiento Ciudadano, dos minutos después estaba agrediendo a la reportera.

Situaciones como éstas hay muchas en la historia de Movimiento Ciudadano y seguirán hasta que el INE siga rentándoles el registro.