Prepotencia en Hacienda del Estado
Usuarios de la Oficina de Hacienda del Estado en esta ciudad, denuncian el pésimo servicio que otorga tanto el personal, como la propia titular de la instancia, Josefina Bello, quién parece más pendiente de sus asuntos personales que de sus actividades como servidora pública, y hasta actuando con prepotencia al momento de atender a quienes acuden a realizar algún trámite.
Aseguran que aun cuando el horario de oficina indica que inicia a las 9:00 de la mañana, se dan las 10:00 de la mañana y la atención apenas comienza, esto a pesar de que hay gente que llega a hacer fila desde las 8:00 de la mañana, entre ello personas de la tercera edad o que presentan algún tipo de discapacidad; mientras que tanto los trabajadores, como la titular se dirigen a los usuarios con un pésimo carácter, atienden con malas formas, regañando a los usuarios.
Otros ciudadanos han señalado, que también bajo el amparo de la jefa de Hacienda, que dé ante mano no es originaria de este municipio, los empleados se dedican a estafar a la gente con los tramites, pidiéndoles dinero para agilizar sus asuntos y solo les roban, cobrándoles cantidades que van desde los 3 mil hasta los 15 mil pesos y no les realizan absolutamente nada; tampoco les regresan el dinero, por lo que ya han presentado denuncias ante la Fiscalía, para tales fraudes.
Adultos mayores y personas con algún tipo de discapacidad o lesión no se escapan al trato arbitrario en esta dependencia, pues en más de una ocasión han acudido a tramitar algún documento, y la titular, haciendo gala de su prepotencia, ignora completamente a los usuarios, poniendo en mal el gobierno de la cuarta transformación que tanto pregonan las autoridades en turno, por lo que ciudadanos esperan que con el cambio de la administración estatal que se aproxima, se reevalúe el desempeño de dichos funcionarios y se hagan los cambios pertinentes.
«Es un pésimo servicio, yo llegué a las 8:30 de la mañana y ya había fila, esperamos hasta las 10:05 de la mañana, para que saliera una señorita, y preguntara que tipo de tramite íbamos a hacer, nos revisaron documentos y a quien le faltaba algo lo regresaban, quien tuviera todo completo lo dejaban entrar para sentarse y esperar, no para hacer el trámite o pasar a algún módulo, de ahí la persona regresó y dijo que esperáramos hasta que nos llamaran y se salió a desayunar con su lonche y detrás de ella como dos empleados más, le pedí a la oficial de guardia que me permitiera pasar a la dirección para poner mi queja y no me dejaron, me dieron las 12:45 del día y apenas me estaban haciendo el recibo para que fuera al banco a pagar, porque no servía su terminal», explicó un afectado.