La honra y el poder: las traiciones
Por Carlos O. Silva Bandala
De alguna manera sabemos que en Morena, cualesquiera de los 3+1 precandidatos a la Presidencia de la República, uno de ellos lo será. Es decir, hay certeza en que uno de ellos será el candidato. Morena el partido político del Presidente de la República, ha adelantado su precandidatura, así sea en cuarteta. Les lleva mucho camino andado a la oposición PAN/PRI/PRD y a MC, alianza y partido, que no definen, ni método, ni perfil político para su posible candidato.
Lo que podemos presumir es que en la alianza Va por México, esperan los resultados de la elección del Estado de México para sentarse y definir la metodología para escoger al candidato. No es tan simple el acuerdo entre los dirigentes de esos partidos, pues en principio dice Acción Nacional que signará las candidaturas a la CdMx y de Presidente de la República, según acordaron de manera cupular. Pero ¿Cómo le van a hacer para lograr quien será el candidato: panista, priísta, ciudadano apartidista? Tanto en el PAN como en el PRI y todo indica que también (Miguel Ángel Mancera) en el PRD, hay pretensión de colocar en la mesa de las negociaciones a uno de sus militantes que se están promoviendo, tales como Santiago Creel, Ricardo Anaya, Beatriz Paredes, Claudia Ruiz Massieu, Enrique de la Madrid, Alejandro Murat, Miguel Ángel Mancera. Estos son 100% militantes partidistas, todos pretenden colgarse de las movilizaciones sociales opositoras al régimen del Presidente y habría que sumar a esa lista de suspirantes, el que propusiesen, para el caso, los colectivos ciudadanos. Todo un batidero y una madeja muy complicada de desenredar.
Hoy PAN/PRI/PRD alardean de que unidos derrotarán al Presidente y a Morena en el 2024. Pero ¿Cómo lo harán, si lo primero, es lo primero: el candidato?
CUENTO CHINO
Coloquial, relato falso e increíble. Lograr una candidatura de unidad opositora, es tanto como un cuento chino. El agua y el aceite no se mezclan nunca. Por sus ambiciones de sueños despiertos, terminarán más que divididos y decepcionados. Todo al tiempo.
LAS TRAICIONES
Del latín traditio, la traición es aquella falta que quebranta la lealtad o fidelidad que debería guardar hacia alguien o algo. Consiste en renegar, ya sea con una acción o con un dicho, de un compromiso de lealtad. Políticamente, el término traidor ha sido usado como un epíteto entre disidentes de un mismo partido o entre miembros de distintos partidos para anular el capital político logrado.
AMBICIÓN
Deseo ardiente de conseguir algo, especialmente poder, riquezas, dignidades o fama.
EMBROLLO
Situación o asunto confuso, desordenado, problemático o difícil de resolver. Existe una historia de traiciones en el PRI, que ejemplifica lo que puede suceder con la candidatura común, qué seguramente la llamarán “de unidad” en la oposición. Cuando Roberto Madrazo Pintado fue candidato presidencial, se formó un grupo llamado Tucom (Todos Unidos Contra Madrazo), liderado por su oponente a la candidatura presidencial, que ambicionaba, Arturo Montiel, mismo que se retiró de la candidatura tras ser acusado de enriquecimiento ilícito.
El Tucom fue un grupo de gobernadores y la misma secretaria general del PRI, Elba Esther Gordillo (aliada a Fox y Martha Sahagún), que se oponían a que Madrazo fuese el candidato presidencial.
Como consecuencia de no haber eje rector político desde el Presidente de la República hacia el PRI, pues para entonces en el 2006, el Presidente era Vicente Fox (PAN), el árbitro que imponía su voluntad en la sucesión presidencial priista, el PRI cayó en la ambición desmedida de algunos, para conseguir la candidatura presidencial y al no lograrlo, se conjuntaron para oponerse a Madrazo, éste que era presidente del CEN del PRI.
En la verticalidad del mando y comando del PRI, desde el Presidente de la República, formados y acostumbrados los liderazgos priístas en esa línea de mando, subordinada al Presidente, mas allá de los militantes y adherentes, la carga política necesaria para los gobernadores se apoyaba en mucho en el partido, en su dirigente nacional. Es por ello por lo que llevó a constituirse la Copago; agrupación de gobernadores primordialmente priístas, para contrapesar el poder presidencial de Vicente Fox. Todos los gobernadores de un color u otro requieren de una fuerza colateral a sus mandatos: la representación partidista. La lógica política del momento llevaba a considerar que, al no contar con ese eje vertical presidencial, el PRI, su líder (Madrazo Pintado), representara la candidatura presidencial. La presencia política nacional y en la militancia, al caso, la tenía Madrazo, por encima de la imagen de cualesquiera de los gobernadores, en ese tiempo. Los promotores del Tucom, envidiosos, actuaron de manera mezquina contra Roberto Madrazo, que, en los hechos políticos, actuaron de manera consecuente contra el PRI, partido político al que pertenecían. No les importó traicionar al Partido, pues fueron factor coadyuvante para la derrota a Madrazo y al PRI.
Hay alrededor de una decena de precandidatos que buscan representar a la alianza Va por México. Solo uno logrará pasar y seguir en el 2024, como el candidato presidencial. Ahí vienen las desilusiones, las mentadas y las traiciones. El resquebrajamiento de la unidad buscada.
DE LO PERDIDO LO QUE SE ENCUENTRE
El candidato de la alianza opositora será para el resto, de dientes para afuera. Subjetivamente los llevará a actos subterfugios de traición. Con la salvedad de terminar, para alguno de ellos, como carroñeros políticos, aceptando ser candidatos plurinominales. Premios de consuelo. Ya lo veremos si no. Vivir fuera del presupuesto, ni pensarlo, dirían.
Ahora bien, la candidatura presidencial del PRI la valida el CPN (Consejo Político Nacional). Alejandro Moreno tiene el control de ese órgano partidista. Torpe y ciego político se verá el no valorar tanto poder y dilapidarlo en una alianza antihistórica. Si bien en el mapeo político de entidades federativas el PRI solo tendrá dos o tres gobiernos estatales, por lo que en el concierto de la Conago su presencia será de chicha y nabo. Sin embargo, a nivel municipal el PRI cuenta con más de 250 presidencias y más de 300 en diversas alianzas, que le representan alrededor de 580 municipios. Esa es su verdadera fuerza de representación e infraestructura política con que cuenta el partido para ir a las elecciones del 2024. El error de cálculo político de Alejandro Moreno es formar parte de una comparsa opositora PAN/PRI/PRD, en la insistencia de derrotar al Presidente y Morena en el 2024 cuando tiene en los hechos, todavía una parte importante de representación política nacional, tanto como para lanzar un candidato surgido de sus filas, sin tener que aliarse con su adversario histórico (PAN). ¡Qué absurdo, qué ilógico!
Nada es imposible en la vida, de manera razonable y en política, consecuentemente. Si quieren seguir, Alito Moreno, sus seguidores y amigos mas cercanos, en las becas plurinominales, de esas representaciones municipales, bien podrían obtener los votos que los beneficie. Sin embargo, tal parece que no lo alcanza (Alito) a comprender, ante tanto descuido en que los tiene en CEN del PRI. Es precisamente en esta parte donde Alejandro Moreno se lavaría la cara; en la alianza al comento, se la embarra.
Ir a esa alianza opositora con un partido a la baja, y ahora dividido en sus cuadros dirigentes, es preámbulo de lo que sucederá para consensuar la candidatura común. Una vez que lo logre ya se vera cuantas traiciones bajo la mesa, se darán.
Para terminar, en los desatinos de Alejandro Moreno, está haciendo añicos al PRI; derrota tras derrota electoral, ahora divide lo poco que tiene el PRI de presencia formal en el Congreso de la Unión dentro del Senado de la República.
Los ex presidentes del PRI habían pedido a Alejandro Moreno la urgente necesidad política, de relevarlo de la dirigencia nacional; entre ellos Manlio Fabio Beltrones y Beatriz Paredes. Consecuentemente el senador Osorio Chong y Claudia Ruiz Massieu, impugnaron legalmente. El INE les dio la razón, pero el tema ha escalado hasta el TEPJF, ahí está, a la espera de su resolución.
Para el tema del presente análisis, el punto no es la legalidad al caso de permanencia de Alejandro Moreno en la dirigencia nacional del PRI, sino resaltar la calidad moral/política de dos ex presidentes del PRI que le pidieron de frente, a Alejandro Moreno que dejara la dirigencia nacional (ante tanta ineficacia), Beltrones y Paredes. En tres votos para destituir al senador Chong de la coordinación senatorial, Beltrones es quien mueve la mano. Paredes, su hija Silvana y Añorve. Ya sabremos más adelante, el pago de la factura a Beltrones. Como podemos apreciar las ambiciones descontroladas llevan a la traición, a costa de compromisos y palabra contraídos. ¿Acaso no había acuerdo entre todos los ex presidentes del PRI para relevar a Alito Moreno?
LOS SEPULTUREROS DEL PRI
Manlio Fabio Beltrones y Alejandro Moreno, juntos sumarán, al menos 18 gobiernos estatales, priístas, perdidos. ¡Qué historias!
A propósito del 29 aniversario de Luis Donaldo Colosio, si Colosio viviera, ¿Qué diría de este PRI agandallado por algunos, dizque líderes políticos?
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