COLUMNISTAS

¿Quién hacía negocio en el ORFIS?

 

 

Por Luis Ramírez Baqueiro

 

“La honradez es un vestido transparente”

– Proverbio español –

 

Vaya que se necesitaba poner orden, dar el manotazo y acabar con la serie de negocios que al amparo del poder se han venido practicando desde el Órgano de Fiscalización Superior del Estado de Veracruz (Orfis).

La denuncia vino del propio presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso Local, Juan Javier Gómez Cazarín quien ha venido señalando incluso desde las mismas instalaciones de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), que al menos la legislatura no sería tapadera de nadie que hubiera ido en contra del patrimonio de las y los veracruzanos.

Gómez Cazarín lo reiteró el pasado 26 de agosto en un mensaje enviado a través de sus redes sociales en donde afirmó: “No se dejen engañar, no vamos a tapar a nadie de los entes fiscalizables, que nadie los quiera charolear.” https://www.facebook.com/100052958912917/videos/1789662984707763

Ahí mismo lanzó la advertencia: “No se permitirá que se «limpien» cuentas públicas de ex alcaldes con daños patrimoniales a cambio de moches.”

Alguien al parecer ha estado lucrando con la posibilidad que daban las etapas del proceso de auditoría, para con ello, salvar de posibles sanciones a los funcionarios municipales en funciones, evidentemente con la contraprestación económica que salve el proceso a favor de estos funcionarios municipales corruptos, beneficiando de paso a los supuestos integrantes del Orfis que habrían estado brindando información como lo tuvo que reconocer la propia auditora General, Delia González Cobos, el pasado 19 de agosto. https://versiones.com.mx/2022/08/19/auditores-de-portilla-filtraban-informacion-confidencial-del-orfis-a-despachos-revela-delia-gonzalez/

Pero eran en verdad, ¿solo los auditores que habría dejado Lorenzo Antonio Portilla Vázquez, anterior titular de Órgano Fiscalizador, los responsables de tan bochornoso entuerto?; ¿en verdad nadie de la actual administración del Orfis estaban enterados del negocio?; ¿Por qué la aún titular del organismo, no ha salido a dar más detalles y presentar las denuncias respectivas?

Quizá ante la evidencia y las pruebas que seguramente habrá de tener en su poder, el propio diputado Gómez Cazarín habilidoso lanzo el reto para esclarecer el tema de la revisión de cuentas claras en los municipios, pues el pasado 3 de septiembre, el Orfis habría confirmado que han ya interpuesto al menos 7 denuncias penales. https://www.alcalorpolitico.com/informacion/presentan-7-denuncias-penales-mas-por-danio-patrimonial-a-cuenta-publica-2019-374886.html

Si el miedo no anda en burro, por el contrario, mejor aclarando las cosas y amanece más temprano, bien iniciaba su mensaje el oriundo de Hueyapan de Ocampo advirtiendo: “el que nada debe, nada teme”, y así mejor se busca bañar en salud la misma titular del Orfis, a la que nadie le puede creer que no supiera que negocitos y enjuagues se traían sus auditores.

Así serán las administraciones municipales 2018-2021 de Texistepec, Tlaquilpa, Tancoco, Castillo de Teayo, Sayula de Alemán, Oteapan y Jesús Carranza las que habrán de explicar el asuntito pendiente, de lo que ahí se diga se podría estar en la posibilidad de conocer como por años, los responsables de la Fiscalización y correcta revisión de los recursos públicos hicieron negocios al amparo de sus cargos.

Se ha logrado saber que desde la semana en que salieron las acusaciones comenzaron los despidos en el Orfis; el primero fue un cercano a la misma Delia Cobos, el personaje Felipe de Jesús Marín Carreón, a quien señalaron de haber estado limpiado cuentas desde hacía dos años, dicha medida justificó la acusación que demostraba lo señalado por el diputado Gómez Cazarín en el sentido de que ahí se estaban maquillando y ofreciendo supuestos apoyos para blanquear cuentas públicas.

Solo así se comprende que se dieran a conocer las denuncias que llevaban más de dos años detenidas durmiendo el sueño de lo injusto por las aparentes instrucciones de la propia titular Delia Cobos y su equipo, que ante la presión de los diputados integrantes de la Comisión de Vigilancia no les quedó más que darles el curso legal correspondiente.

Tuvo que venir un manotazo del Congreso del Estado y del coordinador de la Jucopo para que empezaran a salir las denuncias y quitar a gente que solo se estaba haciéndose pato y enriqueciéndose dentro del Orfis.

Los tiempos de cambio al menos se comienzan hacer evidentes con estas acciones, a pesar de quien piense que dentro de la 4T la opacidad y corrupción se cocina aparte, lo demostrado por Gómez Cazarín habla de ser congruente con el ideario transformador del presidente Andrés Manuel López Obrador.

 

 

Al tiempo.

 

Correo: astrolabiopoliticomx@gmail.com

Twitter: @LuisBaqueiro_mx

 

**Las columnas firmadas en este medio son responsabilidad de quienes las firman**