COLUMNISTAS

¿Y el dinero del Fonden?

 

Por Ricardo Homs

Está empezando la época de lluvias y con ello vendrán inundaciones y después tormentas tropicales y ciclones. Detrás de estos graves fenómenos meteorológicos hay terribles consecuencias para los sectores más vulnerables de México, quienes pierden su patrimonio detrás de estos desastres naturales.

Para apoyar a las víctimas de los desastres naturales se constituyó el Fondo de Desastres Naturales, Fonden, en 1996, aunque empezó a operar en 1999 como parte del Ramo 23. La operación quedó a cargo de la Secretaría de Gobernación, que es la institución donde se ubica la protección civil a nivel federal.

Que hubiese corrupción en la operación del Fonden podría ser verdad. Sin embargo, la corrupción se combate cerrando las oportunidades al abuso.  En la era de la tecnología el control administrativo es mucho más fácil de instrumentar que antes.

Sin embargo, apenas llegó el gobierno de la 4T se planificó la desaparición de los fideicomisos bajo el argumento de la corrupción y con ello la extinción del Fonden, decretada por los diputados de Morena, PES, PT y PVEM. Esto significó la transferencia de los 25,519 millones de pesos que constituían su capital, que fueron absorbidos por la Tesorería de la Federación.

Entre marzo y junio del 2021 se concretó esta abusiva decisión de despojo, que representaba desaparecer el apoyo para los damnificados de terremotos, sismos, huracanes, inundaciones, incendios y en general todos los fenómenos climatológicos y ambientalistas. A cambio se les dejó una ambigua promesa de ayuda económica directa a las víctimas.

Sin embargo, ¿Dónde está el dinero?… ¿Cómo se entregará a las víctimas de los desastres naturales?… ¿Cuáles son las nuevas reglas de operación?… Nada se sabe … Todo es nebuloso. Se destruyó un sistema que funcionaba bien aunque que era perfectible. Sin embargo, en su sustitución hoy no quedó nada.

¿Dónde está el dinero de tantos fideicomisos extinguidos?  ¿Para qué se utilizará ese dinero?  ¿Quién tendrá el control de él?

No es lo mismo cambiar las reglas de algunos fideicomisos donde hubiese habido abusos y esto estaría justificado después de haber sido investigados, que eliminar todos de modo general, sin ninguna justificación. Más que el combate a la corrupción, la eliminación de fideicomisos parecería haber tenido como fin determinante la obtención de dinero.

El ejemplo del Fonden es por el impacto de la gravedad de esta decisión uno de los casos más emblemáticos, arbitrarios e injustificables. Por tanto, el Fonden hacía las veces de un seguro operado desde el gobierno federal y administrado por Banobras.

Es más, para entender su impacto debemos recordar que las condiciones climáticas de mayor gravedad caen generalmente sobre la parte más vulnerable del país, que es precisamente el sur de México, donde las lluvias son torrenciales, donde la gente más pobre vive en las márgenes de los ríos, en condiciones peligrosas y en situación jurídicamente irregular.

Año tras año los noticieros de TV dan cuenta visualmente de los daños patrimoniales a las familias que más se deben proteger.

Entre junio y octubre generalmente se dan los eventos climatológicamente más predecibles, derivados de la formación de tormentas tropicales, -y en las zonas boscosas-, por los incendios generados por el calor del verano. En contraste los sismos pueden darse en cualquier momento de los 365 días del año. Sin embargo, también debemos recordar que muchos de estos eventos sismológicos tienen como epicentro Oaxaca.

En fin, el Fonden será recordado en esta temporada de turbulencias climatológicas.

 

¿A usted qué le parece?

 

 

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