Irresponsabilidad, opacidad en salud y la quinta ola

 

Por Mónica Camarena Crespo

Para dimensionar la opacidad e irresponsabilidad del gobierno federal en materia de salud, solo se debe revisar lo que dijo ayer el propio presidente Andrés Manuel López Obrador al anunciar que, después de más de tres años de su administración “ahora sí” en un año a más tardar, la atención médica y los medicamentos se otorgarán de manera gratuita y universal en el sector de salud.

AMLO con ello, confirmó que su gobierno no podrá en atención médica en al menos 5 años de 6 que durará su periodo presidencial, por cierto una propuesta de su campaña en 2018. 

La culpa de este retraso, lo puede adivinar cualquiera, es responsabilidad de gobiernos pasados y la corrupción; pero seguir responsabilizando al pasado después de más de tres años ya no aplica para los miles de muertos por la pandemia y la falta de medicamentos que han costado tantas vidas por cáncer y otras enfermedades.

 

QUINTA OLA

Con este anuncio No anuncio, porque parecería que AMLO no podrá concretar durante su mandato el acceso a la atención médica gratuita, es que llega la quinta ola por Covid en México; aunque los casos se disparan, la única buena noticias es que por las vacunas, los casos son menos riesgosos y las muertes tienen bajos niveles todavía.

Lo importante, es que serán nuevamente responsables los propios ciudadanos en continuar con las medidas preventivas y los cuidados de no romper la costumbre de evitar las reuniones numerosas.

Pero con la irresponsabilidad que ha caracterizado al gobierno de AMLO en el manejo de la pandemia y aunque lo niegue, fue el “tarambana” de Hugo López Gatell, quién hasta insinuó que venía el fin de la pandemia en México.

El relajamiento social impulsado principalmente por el gobierno puede ocasionar que la Quinta Ola cobre más vidas, pero sobre todo, se van elevar los contagios porque al ser leves los síntomas, la mayoría preferirá no realizarse los análisis. Hay que cuidarse, porque el gobierno prefiere hacer lo que ha sido su estilo, hacer como que no pasa nada muy a pesar que se pierdan vidas.

ÁGORA

En una pesada losa se ha convertido el presidente nacional de lo que queda del PRI, Alejandro Moreno “Alito”, quién se aferra a continuar en una dirigencia que ya trae un fuerte tufo a cadáver. Lo peor para el partido en proceso de extinción, es que nadie alza la voz, vamos, pareciera que nadie le ve futuro y prefieren valorar para donde se van.

 

 

Twitter: @monicamarena