Paco Ignacio Taibo II
La declaración de Paco Ignacio Taibo II, -director general del Fondo de Cultura Económica, la editorial oficial del Estado Mexicano-, delante de la presidenta, -en una “mañanera”-, tocó una fibra muy sensible en estos tiempos de confrontación.
Reconoció la gran importancia del mercado femenino en el consumo de obras literarias. Sin embargo, muy a su estilo tocó un tema que flota en el ambiente: el reparto de oportunidades por cuota de género y planteó que debe evitarse editar obras de poca calidad literaria sólo por cumplir esa cuota de género.
El impacto de su declaración nos pone frente a una situación ineludible: ¿Cuál debe ser la verdadera estrategia para generar equidad de género? … ¿Por cuotas?
Es ineludible que en la literatura hay mujeres valiosas que brillan con luz propia y no le deben nada a la cuota de género. En todo el arte y el trabajo intelectual alrededor del mundo la aportación femenina es indubitable. En ámbitos ampliamente competitivos como los negocios y la política el liderazgo de muchas mujeres alrededor del mundo es incuestionable: empresas globales como General Motors, Citigrup, Grupo Financiero Santander, el laboratorio Glaxo Smith Kline, la petrolera brasileña Petrobrás, la de mensajería UPS, la cadena electrónica Best Buy, The Clorox Co, la chocolatera The Hershey Co, y otras tantas más, son encabezadas por mujeres que dejaron en el camino, -competitivamente-, a hombres brillantes.
¿Cuántas mujeres hoy dirigen los destinos de sus países? Muchas… empezando por el nuestro… El nombramiento de Sanae Takaichi como primera ministra de Japón y jefa de gobierno es muy relevante, pues Japón ha sido un país donde la cultura y las reglas sociales han sido machistas.
Poco favor le hace al talento femenino la existencia de cuotas de género para repartir oportunidades. Un análisis de Linkedin en 74 países reveló que a finales de 2024 el 30.6% de los puestos de liderazgo están ocupados por mujeres, lo cual con absoluta seguridad se debe a sus propios méritos y no a una concesión de cuota de género.
Quizá el deporte sea el único lugar donde las condicionantes físicas impidan la competencia entre hombres y mujeres en igualdad de circunstancias. El caso de la campeona olímpica de boxeo de 2024, Imane Khelif, -cuya feminidad fue cuestionada y por ello, después de estudios fisiológicos resultó excluida de la Asociación Internacional de Boxeo- muestra que las diferencias fisiológicas no son equitativas
La verdadera equidad de género será una realidad cuando sea irrelevante el género de las personas para el otorgamiento de oportunidades laborales, empresariales, políticas, intelectuales, artísticas, académicas y de todo tipo.
Cuando la competencia por las oportunidades se desarrolle entre personas, -y en condiciones equitativas-, independientemente del género, entonces se habrá cubierto esta deuda social.
Las cuotas por sí mismas son inequitativas, pues entonces las oportunidades podrían recibirlas… no quien tenga los méritos, sino esté disponible para aprovechar la cuota.
¿A usted qué le parece?


