Jóvenes, el salvavidas de Movimiento Ciudadano
- El presidiario que pudo ganar espacios haciendo a un lado su enfermizo protagonismo
Por Ángel Álvaro Peña
Los partidos en México mueren por sus propios excesos, antes de que los contrincantes puedan vencerlos en las urnas el deterioro se debe a que sus integrantes se convierten en verdaderos suicidas políticos.
Actualmente más de un partido de oposición tiene ese problema, por no decir todos. El último en verse afectado por sí mismo es Movimiento Ciudadano, con el espectáculo que brinda su líder moral comienza el fin.
Movimiento Ciudadano tiene su origen en Convergencia por la Democracia, partido que nace en 1999, un año después de que su fundador y líder vitalicio, Dante Delgado sale del Penal de Pacho Viejo, donde estuvo recluido dos años por incumplimiento de deberes legales, peculado y enriquecimiento ilícito. Por las que alcanza la libertad una vez que esos delitos fueron prescritos, no porque haya sido absuelto, o porque no hubiera pruebas insuficientes como argumenta el propio indiciado.
Tras las rejas tuvo tiempo de planear una red de complicidad que se disfrazaba de partido político, Convergencia por la Democracia, pronto deja atrás su nombre para llamarse únicamente Convergencia, pero además deja atrás la ideología que le da origen a su primer proyecto identificado con la socialdemocracia, el progresismo y la participación democrática, para saltar en junio de 2011, a Movimiento Ciudadano, por decisión unánime de 586 delegados nacionales, iniciando su camino imparable hacia el conservadurismo.
A partir de esa fecha empieza su recolección de juniors y jóvenes sin vocación que empiezan a jugar a la política y el partido de Dante se convierte en una especie de parvulitos para quienes aspiraran a un cargo de elección popular. Se inscribieron en el jardín de niños personajes como Jorge Álvarez Máynez y Samuel García, quien se inscribe a la escuelita del profesor Dante en 2015, y rápidamente se convierte en el líder estatal del “nuevo partido” en 2017; en 2018, a sólo tres años de aprendizaje del viejo maestro, Samuel se va al Senado, mostrando una gran inconsistencia ideológica y una trivialidad que lo convertía en una estrella del espectáculo y no de un político serio.
La historia emecista del actual líder tiene origen diferente al de Samuel, aunque finalmente terminan fusionados por los intereses más que por las ideas.
Máynez es hijo de Felipe Álvarez Calderón, quien fuera fundador del Partido Comunista Mexicano; sin embargo, al igual que Samuel García es egresado del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, donde estudió Relaciones Internacionales.
Si bien el partido se nutría de jóvenes las estructuras, los proyectos, el discurso era propio de los años de gloria del PRI, manejados por Dante Delgado, quien militó en el tricolor desde 1968, año sangriento.
El partido seguía viéndose viejo a pesar de tener entre sus líderes a gente joven, sin brillo propio ni ideas políticas. Fue necesario que llegara a la escena partidista Mariana Rodríguez, quien se casó con Samuel en 2020, para darle una apariencia juvenil, tanto que sus mítines y presentaciones se asemejaban más a una fiesta infantil que a una propuesta ideológica.
Así, Movimiento Ciudadano tuvo que resistir una etapa de frivolidades, donde el anacronismo de Dante parecía dejar atrás un pasado que sólo se advertía en los discursos retóricos, demagógicos de un Dante Delgado que mostraba que no entendía nada, pero sabía que debía modernizar un parido que empezaba a rezagarlo.
La marginación de Movimiento Ciudadano obligaba a colgarse de cualquier bandera que estuviera lista para adoptarla como propia, así, en 2012, compitió en alianza con López Obrador, lo mismo apoyó el movimiento que exigía la liberación de 1,053 presos políticos en Veracruz, acusados del delito de ultrajes a la autoridad, acerándose a la izquierda para confundir al electorado, es así como Dante logra simpatías del pueblo, aunque con engaños, para el ex presidente municipal de Zapopan, Enrique Alfaro y lo convierte en gobernador de Jalisco, año en el que logra colocar como senador plurinominal a Samuel García, a quien lanzaría después como su candidato a la gubernatura a pesar de sus nexos familiares con el crimen organizado.
Esos fueron los días de auge de Movimiento Ciudadano, después de eso, cuando sus dos gobernadores empezaron a ejercer el poder comenzó la caída de Dante, y la imposibilidad del partido, de crecer.
Al crecimiento de Movimiento Ciudadano contribuyeron varios factores que fue, en primer lugar, captar el descontento ciudadano contra los partidos existentes Morena, PRI, PAN y PRD, por otra parte, la falta de candidatos fuerte de la oposición, por lo que prefiere competir solo en la contienda por la Presidencia de la República en 2024.
En estas elecciones Dante pudo advertir la decadencia de su partido, reflejada en el rechazo ciudadano contra su hijo, Dante Delgado Morales, quien compitió por una senaduría por el estado de Veracruz, pero la pierde por una diferencia que no dejaba dudas de que su tierra natal les había dado la espalda.
Posteriormente ante la falta de acuerdos con la oposición y su persistencia de caminar solo hacia las elecciones, Dante ve frustrada su intención de postular a Samuel García, a quien detiene el Congreso local su camino hacia esa candidatura, por errores administrativos y políticos, la cual recayó, ya por no dejar en Jorge Álvarez Máynez quien mostraba en sus mítines la necesidad de darle espacio a los jóvenes, en medio de ese marasmo en el que había convertido Movimiento Ciudadano.
Los jóvenes se incorporan, nuevos valores de la política que no alcanzaron espacios pero lograron desarrollar una fuerza importante, más allá de la tutoría de Dante Delgado.
Si bien alcanza en la elección de 2024, 6’204,710 votos, y en algunas entidades federativas se convierte en la segunda fuerza electoral, las críticas de la oposición fueron por no sumarse a la alianza opositora hizo ver al MC como parte de Morena, en este momento Dante ordena cuestionar a muerte la elección que arrojó como ganadora a Claudia Sheinbaum desprestigiándose más aún, porque la figura de Dante estaba muy desgastada, luego de la derrota de su hijo y el desprestigio de su trayectoria.
A partir de ahí la caída de Movimiento Ciudadano parecía inevitable. Ahora. Dante cierra filas con Jorge Álvarez Máynez, los emecistas de todo el país lo han nombrado su nuevo dirigente por los siguientes tres años. Todos esperaban que, por lo menos, colocara en una competencia ficticia a su hijo por la sucesión de liderazgo de su partido, pero Delgado Morales ya había abandonado la carrera política luego de la derrota aplastantes sufrida en las urnas.
Otro de los sucesores naturales que podría haber levantado al partido es Luis Donaldo Colosio Riojas, pero es se cuece aparte.
El zacatecano Máynez logró triunfó por órdenes de Dante, nadie resultó sorprendido, como se pronosticaba con un candidato único. Dante fue nombrado presidente de la Comisión Nacional de Convenciones y Procesos Internos.
Los cuadros jóvenes de MC son los únicos que pueden salvar al partido porque personajes como Clemente Castañeda, Patricia Mercado, Miguel Ángel Osorio Chong, Amalia García, Salomón Chertorivsky, Alejandra Barrales, Ivonne Ortega Ortega, Claudia Ruiz Massieu, Braulio López y Samuel. Enrique Alfaro salió huyendo a España luego de entregar el gobierno a Pablo Lemus, quien ganó con dudas de fraude.
Dante dice haber vencido al cáncer, lo que no ha vencido es su protagonismo, su obsesión por el poder y una trayectoria que nunca terminó de lavar.