ECONOMÍA

Desarrollos inmobiliarios acaparan agua a través de concesiones de uso agrícola: Conagua

Mientras comunidades del país pasan hasta 40 días sin acceso al agua, el gobierno ha detectado concesiones otorgadas para uso agrícola que en realidad abastecen desarrollos inmobiliarios o que son usadas para acaparar el recurso y revenderlo en pipas a las zonas más necesitadas, dio a conocer Mauricio Rodríguez Alonso, subdirector de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Ante este panorama, la dependencia revisa más de medio millón de títulos con el fin de frenar prácticas irregulares y garantizar el derecho humano al agua, al mismo tiempo que pone en marcha el Plan Nacional Hídrico, pues en México “hay una profunda inequidad en la distribución del insumo, hay zonas en donde no hay para lo mínimo indispensable”.

“Hay familias que pasan más de 40 días sin tener agua, zonas donde se acapara el agua, se guarda, y no por meses, por años. Tenemos claro que el agua es fundamental para el desarrollo económico de este país”, dijo Rodríguez Alonso al participar en la Tercera cumbre de sostenibilidad y desarrollo económico de BBVA.

En abril, y con cifras tomadas de la Unesco, BBVA dio a conocer que nuestro país padece un alto nivel de estrés hídrico, una situación en la que la demanda de agua es mayor que la cantidad disponible.

Este martes, el subdirector de la Conagua indicó que el 76 por ciento del agua disponible en México se destina al uso agrícola, el 15 por ciento es para el uso urbano, mientras que la industria y la generación de energía ocupa el 9 por ciento.

Concesiones excesivas

Y aunque el gobierno tiene como objetivo que la distribución del insumo sea equitativa, racional y ordenada entre la población y la industria, hay varios factores que en este momento representan varios obstáculos, apuntó.

Uno de los principales es que en el país hay un exceso de concesiones para uso de agua que fueron entregadas en el pasado.

“En 1992 cuando se promulgó la Ley de aguas nacionales, hasta antes de la emisión de esa ley, en todo el país había dos mil 600 concesiones. De 1992 a 2003 estas crecieron a 360 mil concesiones. Se hizo un sobre concesionamiento del agua en donde se perdieron de vista ciertos ejes, como la distribución equitativa como el crecimiento agrícola e industrial”, profundizó Rodríguez Alonso.

Al mismo tiempo, el funcionario reconoció que “Conagua no tiene una plataforma adecuada, tenemos bases de datos que no conviven entre sí. ¿En qué repercute todo esto? El no tener los mecanismos tecnológicos adecuados al interior repercute en la atención que damos como institución pública”.